24.- Profesora Ethelvina Mercado Castro.( en la margen izq,fila inf.)
Originaria de Tantoyuca,Veracruz.
Me dió 2 do. año de primaria.
A la hora del recreo, nos ponía a bordar. Manteles, carpetitas, toallas.
Nos indicaba que colores eran los más apropiados para los dibujos.
Cuando se jubiló, y en algunas ocasiones, la llegué a encontrar por las calles de Tampico,Tamaulipas, porque andaba de compras, me comentaba de lo arrepentida que estaba de haberse jubilado.
Que extrañaba a los alumnos, el bullicio, sus travesuras.
Que extrañaba a sus compañeros maestros.
Pienso, que como ella, hay por el mundo, infinidad de profesores, que aunque reciban su jubilación, todo su Ser, no entiende lo que dice un papel, y sienten que los salones los atraen; que los han atrapado.
Me decía, si es sabido como me sentiría, jamás me hubiera jubilado.
Hubiera seguido trabajando, hasta que Dios me hubiera recogido.
A la hora del recreo, nos ponía a bordar. Manteles, carpetitas, toallas.
Nos indicaba que colores eran los más apropiados para los dibujos.
Cuando se jubiló, y en algunas ocasiones, la llegué a encontrar por las calles de Tampico,Tamaulipas, porque andaba de compras, me comentaba de lo arrepentida que estaba de haberse jubilado.
Que extrañaba a los alumnos, el bullicio, sus travesuras.
Que extrañaba a sus compañeros maestros.
Pienso, que como ella, hay por el mundo, infinidad de profesores, que aunque reciban su jubilación, todo su Ser, no entiende lo que dice un papel, y sienten que los salones los atraen; que los han atrapado.
Me decía, si es sabido como me sentiría, jamás me hubiera jubilado.
Hubiera seguido trabajando, hasta que Dios me hubiera recogido.